Me viertes tu llovizna
me abochorna el calor
y se llenan de cristales
las flores, mi pelo y
yo.
Yo que me agilizo en tu
vida
en un tic tac intenso
y voy mordiendo las
horas
con furia, verso a verso
Se abren ríos profundos
que van bordeando tu
fauna
y perfilo tus angustias
y las sello con mi
savia.
Y me enredo entre tu
sombra
columpiándome en tus
ramas
y en las venas de tus
hojas
te voy tallando mi alma.
Entre el pistilo de tus
ventanas
y mis estambres
melocotón
suspirará la vida
y te pariré una flor.
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